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El modelo energético actual es tremendamente injusto y priva de energía a las personas que se encuentran en situación de precariedad. Está claro que las grandes empresas energéticas se enriquecen a nuestra costa, y no les importa el daño que puedan causar, ni las graves consecuencias sociales y ambientales de sus decisiones para la población.
Pero hay alternativas, como la energía comunitaria y las comunidades energéticas, en las que la energía renovable está en manos de las personas. Necesitamos apostar por las mismas para que haya un cambio real: democratizar el modelo energético, garantizar el derecho a la energía y combatir la crisis climática.
Esto es posible y ya es una realidad: existen cientos de iniciativas de comunidades energéticas en toda la geografía española y ahora necesitamos que se expandan y crear miles.
Por eso necesitamos que te unas, para reclamar al Gobierno un impulso decidido por la energía comunitaria, y transformar así el sistema energético hacia uno más justo, 100% renovable y participativo.
Objetivo
Presionar al Gobierno para impulsar las comunidades energéticas: fortalecer el papel de la ciudadanía para lograr una transición energética descentralizada, democrática e inclusiva. En la actualidad, menos del 1% de toda la energía renovable instalada está en manos de la ciudadanía a través de la energía comunitaria. Queremos que se creen 8.000 comunidades energéticas, una por cada municipio (más en las ciudades) con lo que conseguimos cubrir el consumo eléctrico del sector doméstico y terciario.
¿Por qué se necesita la energía comunitaria?
La energía comunitaria impulsa una transición energética en manos de la ciudadanía y basada en fuentes de energía renovable. Nos ofrece la oportunidad de tomar el control de nuestra energía, reducir nuestra dependencia de las grandes empresas y construir un mundo donde las personas y la Tierra estén en el centro.
¿Por qué es importante impulsar las comunidades energéticas?
Porque las grandes empresas energéticas siguen beneficiándose a expensas de precarizar la vida de las personas y de agravar la crisis climática y de biodiversidad. Es hora de tomar el control y hacer algo al respecto. Mientras nuestras facturas de la luz y el gas van en aumento y provocan cortes de suministro a personas en situación de vulnerabilidad, el oligopolio energético sigue batiendo récords de beneficios con miles de millones de euros, de hecho obtienen más beneficios que la mayoría de empresas energéticas europeas.
Debido a los altísimos precios de la energía, ocho millones de personas sufren pobreza energética en nuestro país. No pueden calentar su casa y tampoco enfriarla en momentos de olas de calor ocasionados por la crisis climática.
¿Quién es la Coalición por la Energía Comunitaria?
Es un movimiento ciudadano, conformado principalmente por colectivos y organizaciones que impulsamos las comunidades energéticas y abogamos por un cambio en el modelo energético hacia uno más justo, sostenible y participativo.
¿Qué pedimos?
- Aumentar la financiación para el impulso real de las comunidades energéticas de base ciudadana:
- Impulsar una comunidad energética por cada municipio
- Impulsar figuras de asesoramiento para la creación de comunidades energéticas
- Las grandes energéticas no pueden constituir comunidades energéticas, sería un engaño a la ciudadanía
- Permitir que las comunidades energéticas puedan gestionar la red de distribución y evitar así trabas de las grandes empresas
