EFE entrevista a Juantxo López de Uralde. El hasta ahora presidente de la Comisión en el Congreso para la Transición Ecológica y tras varios años como diputado -aunque no repetirá en esta legislatura-, ha criticado de cara a la próxima cumbre climática mundial, el “poder petrolero” en la COP28, que amenaza con tirar por tierra los avances contra la descarbonización mundial.
López de Uralde, ex-director de Greenpeace, ha destacado el trabajo de la Comisión para sacar adelante leyes tan relevantes en esta legislatura como la de cambio climático o la de residuos, llegando a acuerdos muy importantes y muchas veces complicados, aunque asegura haber echado en falta “una mayor empatía” con la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera.
PREGUNTA: ¿Considera que Pedro Sánchez se ha implicado en la agenda climática ?
RESPUESTA: El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, conoce el tema ambiental; fue precisamente presidente de la Comisión de Cambio Climático del Congreso. Lo conoce y creo que le importa. El problema es que sus políticas llegan hasta donde llegan. Llevamos muchos años haciendo políticas ambientales y sin embargo, seguimos deslizándonos hacia abajo en el abismo de la crisis ecológica. Hay que ir más allá de lo que se está haciendo.
P:- Su figura como defensor ambiental ha sido determinante en la política verde del país durante décadas. ¿Perderá peso el ecologismo español al no seguir usted en el Congreso?
R:- Yo creo que sí. Los partidos verdes teníamos dos escaños, el de Inés Sabanés, di y el mío. Presidíamos la Comisión de Transición Ecológica en un momento clave que nos permitió sacar adelante leyes importantes como la de cambio climático o tramitar de manera urgente la Ley del Mar Menor. Todos somos verdes, en relación con Sumar, pero unos más que otros. Si hacemos un recorrido histórico, en 2015 el ecologismo político estaba fuera de las instituciones. Conseguimos entrar gracias al exlíder de Podemos, Pablo Iglesias. Nos abrió las puertas y rompió una tendencia histórica. Es muy importante que las políticas que se desempeñan en este caso desde el Ministerio de Transición Ecológica tengan un respaldo político en el Congreso. Hubiera sido bueno que el peso del ecologismo político se hubiera mantenido en el Congreso.
P- ¿Cuál es su relación con Sumar y la vicepresidenta en funciones Yolanda Díaz?
R:- Una serie de personas fuimos vetadas de las listas de Sumar en la última convocatoria electoral. Se ha hablado mucho de la ministra de Igualdad, Irene Montero, pero no ha sido solo ella. De un día para otro nos dejaron fuera sin ninguna explicación, que hasta el día de hoy no he recibido. Mi relación con Yolanda Díaz era buena. Yo creía que era buena, pero lo verdad es que desde que me dejaron fuera de las listas no ha vuelto a tener contacto conmigo, ninguno.
P.- ¿Y con la vicepresidenta tercera en funciones, Teresa Ribera?
R.- Desde el punto de vista personal he echado en falta una mayor empatía, no ha existido y lo he echado de menos, pero políticamente hemos avanzado mucho sacando adelante leyes y propuestas ambientales clave. Más allá de algunas discrepancias políticas que tuvimos, personalmente, me hubiera gustado más ambición en algunos campos como en los objetivos de emisión recogidos en la Ley de Cambio Climático o en lo relativo al sistema de devolución y depósito de la Ley de Residuos. Hubo muchos temas en los cuales nos peleamos por ir más allá, pero esas discrepancias no explican esa falta de empatía.
P.- ¿Cuáles son los grandes retos medioambientales en España?
R.- Los grandes retos ambientales en este país siguen relacionados con el cambio climático y, en concreto, destacaría la reforma del transporte y la adaptación de las ciudades al cambio climático, pero sobre todo, acometer los problemas de gasto de agua en el sector primario español. Los regadíos consumen mucha agua, y aunque la derecha trata de manipular este discurso, el cambio climático es lo que más “machaca” al campo español. En el plano político tenemos una labor que hacer, que es fortalecer lo que representa Alianza Verde, una forma de hacer política muy alineada con el ecologismo social. Además el próximo 2 de diciembre, una vez vencido el plazo del 27N para la investidura de Pedro Sánchez, celebraremos en Madrid nuestra Asamblea para acometer y pensar nuestra hoja de ruta.
P.- ¿Cómo se plantea la Conferencia de las Partes de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP28)?
R.- Soy muy escéptico con esta COP; no sé si se podrán conseguir avances sustanciales. Combatir el cambio climático es un problema global con todos los países involucrados, pero, en esta COP no veo cómo se puede avanzar si la gestión del evento va a estar en manos de las empresas petroleras. El momento se hace imprescindible, hay que avanzar, pero insisto, soy muy escéptico. La COP es el reflejo de las políticas de los gobiernos presentes en la cumbre y es por ahí por donde hay que apuntar. EFEverde